Tres trajeados y la Luna

Ayer tuvimos un pequeño y rollizo retoño nuevo, y este año tuvimos la suerte que llego con un pan bajo el brazo, bueno con tres, jejeje. A los pocos días en Reyes, mi Madre me regalo una visita maravillosa, grande, sonrosada y como siempre tímida y pizpireta, a su bola mientras los otros tres, vestidos de gala se dedicaban a repartir alegría, ilusiones, deseos entre todos aquellos que les salían al paso, pero yo tuve mis regalos de tu a tu, entre ella y yo.
Bueno, eso es para mi conmigo mismo, no os enfadeis, para que veis que soy bueno os muestro parte de nuestro encuentro....

Y mientras yo esperaba que llegara mi Madre, Alicante, allá en la lejanía iba encendiendo las luces para recibir a sus ilustres visitantes, para que se sintieran como en un cuento de hadas y lucieran sus lentejuelas.......

 Por fin, ahí estaba ella, temerosa de que la vean en todo su esplendor....

En éstos últimos tiempos en que ando papel arriba, papel abajo, preparativos, aprendizajes, idas y venidas, estoy leyendo y aprendiendo bastante y de variadas cosas y no había reparado en unos versos que van dedicados a mi Madre, la Luna. Aquí os los dejo ....

Mira, bajo el  distante firmamento

vagabundea la luna sin trabas;

al pasar derrama su resplandor 

por igual sobre toda la naturaleza.

Atisba desde una nube, 

iluminándola con su magnificiencia,

y ya se encuentra en la siguiente;

y tampoco en ésta permanecerá por mucho tiempo.

¿Quien le mostrará su lugar en el cielo

diciéndole: detente?

¡Quién le dirá al corazón de una joven,

ama sólo a uno, no cambies de amor!

Bueno seguimos con nuestro encuentro, si me lo permitís

Y mientras ella iba perdiendo la vergüenza y resplandeciendo cada vez más, al otro lado la apoteosis llega a niveles de estallido luminoso, y era debido a las caras iluminadas de los pequeños y la luz que irradiaban sus ojos abiertos como platos. Que todos los sueños y deseos se hagan realidad. Un beso, Ángel